El presidente de la Comisión Nacional de Tribunales Superiores de Justicia de los Estados Unidos Mexicanos (Conatrib), magistrado Edgar Elías Azar, advirtió que el tema de la justicia no puede relegarse en un rincón frente a otros como la educación, vivienda, salud o finanzas públicas, ya que son los jueces, fiscales y defensores a quienes la ciudadanía ve y reconoce como los que podrán hacer respetar sus derechos.
Al participar en la inauguración del Encuentro Nacional de Procuración e Impartición de Justicia 2016, enfatizó que la justicia se mantiene como el primer deber del Estado moderno, y que lo demás, dentro del catálogo de preocupaciones públicas, debe desfilar más tarde bajo la premisa de que lo primero es crear sociedades en orden, armónicas y fundadas en el respeto mutuo de los derechos y de las oportunidades.
Con la presencia del jefe de gobierno Miguel Ángel Mancera Espinosa, y del procurador General de la República, Raúl Cervantes Andrade, el magistrado también recalcó que la justicia debe ser una función independiente, cabalmente autónoma, y puntualizó que una justicia bajo sospecha de ser avasallada por actividades políticas sucumbe ante la peor de sus patologías, que es la politización de la jurisdicción.
En el Edificio de Salas Penales del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México (TSJCDMX), Elías Azar planteó la necesidad de aclarar que la independencia judicial, como principio básico, nunca debe de estar en juego. La intromisión de otros poderes en la vida de los poderes judiciales, advirtió, no se puede permitir bajo ninguna circunstancia.
Se pondría en jaque, abundó el también presidente del TSJCDMX, el mismo basamento constitucional que obliga a todos a garantizar seguridad jurídica y acceso a una justicia imparcial a favor de los ciudadanos.
Recordó que los poderes públicos deben respetarse entre sí, y que cada uno de los que integran la trilogía del Estado debe entender, bajo la lógica republicana, democrática y existencial de las instituciones públicas, que ninguno de ellos puede trastocar e invadir a otro alegando una falsa ciudadanización.
Ante presidentes de tribunales, fiscales y procuradores de todo el país, el magistrado Elías Azar habló de los gobiernos judiciales y de la necesidad de que aseguren una verdadera organización y cambio hacia la nueva justicia mexicana, que deberá centrarse en la forma de disminuir las cargas de expedientes y garantizar la calidad de las decisiones.
Ése es el reto, dijo, de la democracia moderna judicial: justicia para todos, pero justicia digna, justicia clara, justicia pronta; justicia en toda la extensión de la palabra.
Al acto también asistió el procurador General de Justicia de la Ciudad de México, Rodolfo Ríos Garza, y el secretario Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, Álvaro Vizcaíno Zamora, entre otros.